Sebastián Graviotto se hizo conocido en 2007 cuando participó de Gran Hermano, donde si bien no llegó a la final, se convirtió en uno de los participantes más recordados. En ese entonces, su apellido generó revuelo al conocerse que es sobrino de Guido y Silvia Süller, lo que aumentó su exposición en los medios.

Fue durante esa época que Juana Repetto confesó sentir una atracción por él. Años después, en 2018, volvieron a cruzarse y comenzaron una relación que derivó en una familia ensamblada.

Graviotto ya era padre de Lupe, mientras que Juana había sido madre de Toribio mediante inseminación artificial. En 2021, anunciaron que esperaban a Belisario, su primer hijo en común. Se casaron en 2020 y celebraron su unión en 2023 con sus tres hijos presentes.

Una vida lejos de los medios y una separación en buenos términos

Con el tiempo, Sebastián decidió alejarse de la exposición mediática y se dedicó al deporte. Hoy trabaja como instructor de snowboard y suele viajar al exterior, aunque en redes siempre se mostró muy unido a su familia.

La ruptura fue confirmada por Juana a través de Instagram, donde explicó que la decisión se tomó después de atravesar varias crisis: "Estoy convencida de que esta decisión es la mejor. Es lo mejor para los chicos, que son nuestra prioridad absoluta".

La actriz también dejó en claro que siguen enfocados en construir una familia desde un nuevo lugar, con respeto y amor: "Por algo nos estamos separando, pero con mucho amor y firmeza para hacer lo mejor por los chicos".

De esta manera, Juana cerró el tema públicamente y prometió seguir compartiendo su día a día con la buena onda que la caracteriza.