La lucha entre Kamala y Trump por llegar a la Casa Blanca

A 15 días de que se lleven a cabo las elecciones presidenciales en Estados Unidos, la contienda electoral entre Kamala Harris y Donald Trump está al rojo vivo. Ambos candidatos, con sus propias tácticas y estrategias, están luchando para sumar votos en una elección que, según la mayoría de las encuestas, podría terminar con un empate técnico.

Hay templos y templos

La candidata por el Partido Demócrata, Kamala Harris, festejó ayer su cumpleaños haciendo campaña en Georgia y, junto a Stevie Wonder, realizó un acto en la iglesia Divine Faith Ministries International de Jonesboro. Su visita está vinculada a la campaña nacional conocida como "Almas a las Urnas", un esfuerzo de movilización liderado por la Junta Asesora Nacional de Líderes Religiosos Negros, que envía representantes a todos los estados para alentar la votación anticipada. No es casualidad que Harris haya elegido Georgia, ya que se considera uno de los Estados decisivos a la hora de aportar votos al Colegio Electoral que elige al presidente.

Es importante aclarar que, para las congregaciones de iglesias negras en todo el país, es de suma importancia la votación anticipada debido a que buscan contrarrestar las tácticas de supresión de votantes que se remontan a la era de Jim Crow, una era marcada por leyes que promovían la segregación racial en todas las instalaciones públicas bajo el lema "separados, pero iguales". En Georgia, la votación anticipada comenzó el martes pasado y más de 310.000 personas votaron ese día, más del doble del total del primer día en 2020.

Por el lado del Partido Republicano, Donald Trump hizo campaña en otro tipo de templo estadounidense y visitó un McDonald's en el Estado clave de Pensilvania. El republicano se presentó el domingo en el restaurante de comida rápida, se puso el delantal y pasó unos minutos cocinando papas fritas junto a los empleados y repartiéndolas a los clientes que pasaban por ahí. 

Ni Pensilvania ni McDonald´s fueron elegidos al azar por el expresidente estadounidense. En cuanto a la elección del Estado que se encuentra al noreste del país, es trascendental en términos electorales por ser el 5° en cantidad de votos que aporta al Colegio Electoral de Estados Unidos. Además, la gran población latina que vive allí es clave para definir quién gana el Estado.

En cuanto a la elección del local de comida rápida, se debe a una chicana política para descalificar a Kamala Harris. Según el equipo de campaña de Harris, la actual vicepresidenta trabajó durante el verano de 1983 en un McDonald´s de la ciudad de Alameda, en el Estado de California, atendiendo en la caja y cocinando papas fritas. Sin embargo, Trump considera que eso es mentira y acudió al local de comida rápida con el objetivo de poder afirmar que "ya había trabajado más tiempo en McDonald´s" que la candidata demócrata.

Celebridades: un punto en común entre ambos candidatos

A pesar de todas sus diferencias, tanto Harris como Trump pueden decir que tienen un punto en común. Ambos invitaron a celebridades para que los acompañen y ayuden en su campaña.

En actos realizados en las ciudades de Detroit y Atlanta, la demócrata recurrió a figuras como Lizzo y Usher, ambos cantantes estadounidenses, para animar al público que había concurrido. Por el lado del expresidente republicano, invitó al multimillonario Elon Musk para hacer campaña a su favor en varios Estados del país.

La participación de celebridades en la política no es algo nuevo, pero en la carrera presidencial de 2024 su influencia se volvió mucho más relevante. El respaldo de figuras como Jennifer Lawrence, Taylor Swift y Oprah Winfrey para Harris, y de Hulk Hogan, Kid Rock y Elon Musk para Trump, reflejan la polarización del electorado y cómo el apoyo de figuras públicas puede inclinar la balanza a favor de uno u otro candidato.