En respuesta a meses de agresiones hutíes, Israel lanzó una serie de ataques aéreos en Yemen que dejaron al menos nueve muertos. Según el ejército israelí, los bombardeos se realizaron en dos fases durante la madrugada del jueves. Las primeras oleadas impactaron en puertos estratégicos como Hodeida, Salif y la terminal petrolera de Ras Isa. Posteriormente, los ataques se dirigieron a infraestructuras energéticas en Saná, intensificando la crisis energética en la capital.

Un vocero militar hutí aseguró que los bombardeos empeorarán las condiciones de vida en Saná, donde ya predomina una grave escasez de servicios básicos.

Escalada en el Mar Rojo: el impacto en la navegación global

El conflicto entre Israel y los hutíes, aliados de Irán, afecta cada vez más al comercio marítimo en el corredor del Mar Rojo. Los rebeldes han atacado más de 100 embarcaciones desde que comenzó la guerra entre Israel y Hamás en octubre de 2023.

El ministro de Defensa israelí, Israel Katz, lanzó una advertencia contundente: "Quien nos ataque será dañado siete veces". Por su parte, los hutíes justifican estos ataques como una forma de presionar a Israel para que detenga su ofensiva contra Hamás en Gaza.

Yemen, atrapado entre dos conflictos

Yemen, devastado por más de una década de guerra civil, se enfrenta ahora a una escalada adicional por los ataques israelíes. El puerto de Hodeida, clave para la entrada de alimentos y ayuda humanitaria, ha sido blanco de múltiples bombardeos recientes, agravando la ya crítica situación humanitaria.

Este conflicto ha causado más de 150.000 víctimas, convirtiéndose en uno de los peores desastres humanitarios del mundo. La comunidad internacional teme que la reciente escalada pueda desestabilizar aún más la región y complicar los esfuerzos de paz liderados por Arabia Saudita y otros actores globales.