Desde que estalló la causa por presuntas irregularidades en la contratación de seguros en organismos del Estado, la Justicia federal secuestró más de 100 teléfonos celulares. Algunos ya aportaron datos clave, como el de María Cantero, exsecretaria presidencial, que reveló conversaciones con Alberto Fernández sobre gestiones internas en la Cancillería.

Pero todavía hay más de 40 dispositivos que no pudieron ser desbloqueados. Entre ellos, el del exintendente de la Quinta de Olivos, Daniel "El Gordo" Rodríguez, hombre de confianza de Fernández y del broker Héctor Martínez Sosa. La mayoría están en manos de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) o a la espera de nuevas herramientas tecnológicas para avanzar con el análisis forense.

Un mensaje de WhatsApp y una foto en Olivos que activaron nuevas sospechas

Una de las frases que encendió alarmas en la causa fue un "ya me ocupo", que Alberto Fernández le habría enviado a Cantero en referencia a los seguros de la Cancillería. El exmandatario intentó explicar que solo fue una advertencia a Cafiero sobre posibles maniobras sospechosas, pero el juez Sebastián Casanello decidió ahondar en ese punto.

También se incorporó una imagen que muestra a Fernández y a Martínez Sosa reunidos en la Quinta de Olivos en julio de 2021. La foto fue tomada en el despacho de Rodríguez, quien ahora es investigado por su patrimonio: el juez pidió un informe completo a ARCA, incluyendo bienes, vehículos, cajas de seguridad y cualquier información financiera relevante.

En febrero, la investigación pasó a manos del juez Casanello luego de que venciera la subrogancia de Julián Ercolini. A pesar de que ya se habían tomado declaraciones indagatorias, el nuevo magistrado decidió revisar desde cero toda la documentación antes de avanzar con posibles procesamientos o sobreseimientos.

Mientras tanto, otras líneas se siguen abriendo: la Justicia investiga si hubo pólizas gestionadas por Martínez Sosa en organismos públicos como la AFIP, Fabricaciones Militares o el Servicio Penitenciario Federal. También se analizan los movimientos financieros de empresas que cobraron millonarias comisiones durante el mandato anterior.

Aunque muchos de los chats recientes están reservados en legajos confidenciales, los investigadores aseguran que aún puede haber sorpresas. La causa sigue sumando elementos, y los celulares podrían ser la llave para reconstruir una trama que va mucho más allá de los seguros.