El debate sobre la suspensión de las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) está a punto de llegar al Senado tras obtener media sanción en Diputados. Con un panorama político fragmentado, especialmente dentro del kirchnerismo, la Cámara alta se prepara para discutir este tema crucial en los próximos días, antes de que finalicen las sesiones extraordinarias.

La vicepresidenta Victoria Villarruel, a través de la Secretaría Parlamentaria, convocó a una sesión de la Comisión de Asuntos Constitucionales para el próximo miércoles a las 15. Este es un paso esencial para avanzar con el proyecto que ya cuenta con media sanción de la Cámara baja. Sin embargo, la comisión se encuentra sin presidente tras la expulsión de Edgardo Kueider, lo que añade un desafío logístico antes de entrar en materia. La tucumana Sandra Mendoza asumirá la presidencia temporal para iniciar los procedimientos.

Incertidumbre y estrategias políticas

La incertidumbre sobre cómo votarán los senadores es palpable. Se espera que varios gobernadores, incluso aquellos cercanos a Cristina Kirchner, apoyen la suspensión, siguiendo el ejemplo de los senadores aliados a Gerardo Zamora y Raúl Jalil. Con el presidente Javier Milei planeando un viaje a Estados Unidos, Villarruel necesita asegurar el debate y, posiblemente, la aprobación en el Senado antes del 20 de febrero.

Fuentes parlamentarias sugieren que el Senado seguirá la senda de Diputados, con un mix de votos oficiales, dialoguistas y algunos del bloque Unión por la Patria, que ya demostró su división en la última votación. Hasta el momento, el conteo de votos apunta a una mayoría ajustada, pero los movimientos de los gobernadores y la posición de la UCR podrían alterar este balance.

Entre los gobernadores peronistas, se observan fisuras, con algunos apoyando abiertamente la suspensión de las PASO. La situación de Axel Kicillof es particularmente interesante, ya que busca un desdoblamiento electoral que le permita independizarse del kirchnerismo.

En cuanto a la UCR, hay dudas sobre su postura. Mientras algunos senadores radicales como Maximiliano Abad y Carolina Losada se opondrían, Martín Lousteau, un defensor histórico de las internas, podría influir en la decisión final.