El Gobierno de Milei rechaza la revocación de custodia por parte de Maduro y advierte contra cualquier intromisión en la Embajada Argentina
La Cancillería argentina condena la decisión de Nicolás Maduro de retirar la custodia de la embajada argentina en Venezuela de manos de Brasil y alerta que cualquier intento de intromisión será enfrentado por la comunidad internacional.
El gobierno de Javier Milei manifestó su firme rechazo a la reciente decisión del régimen de Nicolás Maduro de revocar la custodia de la residencia de la embajada argentina en Venezuela, anteriormente en manos de Brasil. La Cancillería argentina, dirigida por Diana Mondino, ha emitido un comunicado oficial en el que condena esta medida unilateral y advierte sobre las posibles repercusiones internacionales de cualquier intento de intromisión en la sede diplomática.
La decisión de Maduro se produjo tras un histórico acuerdo entre Argentina y Brasil que permitía a este último país resguardar la residencia de la embajada argentina en Caracas desde el 1 de agosto, luego de la expulsión de los diplomáticos argentinos por el régimen chavista. Este acuerdo había sido establecido en respuesta a las disputas sobre la legitimidad de las elecciones presidenciales en Venezuela, que la oposición y varios países internacionales consideran fraudulentas.
"La República Argentina expresa su agradecimiento a la República Federativa de Brasil por su compromiso y responsabilidad en la protección de nuestros inmuebles diplomáticos en Venezuela", declaró la Cancillería en su comunicado. "Cualquier intento de intromisión o secuestro de los asilados en nuestra residencia será enérgicamente condenado por la comunidad internacional".
La reacción del gobierno argentino llega en un momento crítico, ya que el régimen de Maduro ha comenzado a rodear la residencia de la embajada con patrullas de inteligencia y fuerzas de seguridad. El gobierno argentino ha subrayado la inviolabilidad de las instalaciones diplomáticas, citando la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas, que garantiza la protección de las misiones diplomáticas internacionales.
Por su parte, la Cancillería de Brasil, conocida como Itamaraty, también ha manifestado su sorpresa y descontento con la decisión de Maduro. En su comunicado, Brasil reafirmó su compromiso de continuar custodiando la sede diplomática hasta que el gobierno argentino designe otro Estado aceptable para Caracas. "El gobierno brasileño destaca, en los términos de las Convenciones de Viena, la inviolabilidad de las instalaciones de la misión diplomática argentina", afirmó el ministerio.
La tensión entre Argentina, Brasil y Venezuela aumentó considerablemente desde las elecciones presidenciales en Venezuela, en las que el régimen de Maduro fue reelegido en una votación ampliamente criticada por la oposición y observadores internacionales. La situación se complica aún más con la presencia de seis refugiados políticos de la oposición venezolana en la residencia argentina, quienes están bajo la protección de Brasil desde el inicio del conflicto diplomático.