El Gobierno enviará este martes la nueva ley ómnibus
Después de intensas negociaciones y reuniones entre representantes del oficialismo y sectores de la oposición, el Gobierno está listo para enviar mañana el borrador final.
Esta determinación se alcanzó tras encuentros cruciales entre funcionarios del Ejecutivo, encabezados por Nicolás Posse y Guillermo Francos, con miembros destacados del bloque de Miguel Ángel Pichetto y la Unión Cívica Radical (UCR).
Uno de los puntos clave de discusión fue el impuesto a las Ganancias, que generaba divergencias entre las partes. Finalmente, se acordó establecer un mínimo no imponible de $1,800,000 para solteros y $2,200,000 para casados con dos hijos.
Según fuentes del Poder Ejecutivo, se espera que el borrador con los cambios discutidos con varios sectores dialoguistas se entregue este martes a gobernadores y líderes de bloque de la oposición para su revisión final.
Las reuniones en la Casa Rosada con Hacemos Coalición Federal (HCF) y la UCR fueron lideradas por Nicolás Posse, Guillermo Francos y Martín Menem.
Ambos encuentros se desarrollaron en el Salón de los Escudos y contaron con la presencia de figuras destacadas de cada espacio político.
Nueva versión de la ley ómnibus
Tras estas negociaciones, el Gobierno se comprometió a enviar una nueva versión de la Ley Bases al Congreso y a los gobernadores provinciales.
Este texto contendrá 269 artículos divididos en 11 títulos, en contraste con los 664 artículos de la versión original presentada en enero.
El Ejecutivo busca reducir las emergencias y facultades de 11 a 4, concentrándose en áreas administrativa, económica, financiera y energética. Además, se incluirán capítulos referidos a la Reforma del Estado, incentivos para grandes inversiones y la privatización de empresas públicas.
Sin embargo, las principales diferencias persisten en temas impositivos y la restitución del Impuesto a las Ganancias, que se posponen para discusiones futuras.
Por su parte, desde Hacemos Coalición Federal se dejaron sugerencias, incluyendo mayor presión impositiva sobre testaferros en el blanqueo de capitales y ajustes en los porcentajes del impuesto al juego.