El Gobierno nombrará al reemplazante de Werthein en la embajada de EE.UU. tras las elecciones
La Casa Rosada tiene candidatos en mente para la embajada en Washington, pero la decisión se tomará después de los resultados electorales en EE.UU. La relación con el nuevo presidente será clave para el futuro diplomático.
El Gobierno se prepara para nombrar al sucesor de Gerardo Werthein en la embajada de Estados Unidos, un cargo de gran relevancia que será definido una vez que se conozcan los resultados de las elecciones presidenciales entre Kamala Harris y Donald Trump. Werthein asumirá en los próximos días como ministro de Relaciones Exteriores en un acto en el salón Blanco de la Casa Rosada, mientras que Diana Mondino no será reubicada en el Estado por el momento.
Fuentes cercanas a la Casa Rosada indicaron que hay nombres en carpeta, pero se priorizará esperar los resultados electorales en EE.UU. "Va a ser alguien del riñón de Werthein. Es una embajada importante", afirmó un colaborador del gobierno a TN.
Desde Balcarce 50, se reconoce un interés por la victoria de Trump, aunque se afirma que no se realizará un gesto público a favor del candidato antes de los comicios. El Ejecutivo anticipa que, si el republicano logra un segundo mandato, las negociaciones con el Fondo Monetario Internacional (FMI) podrían acelerarse.
Werthein tendrá la responsabilidad de gestionar la delegación argentina ante el G20, que se celebrará en Brasil el 18 y 19 de noviembre. Además, se espera la visita de la primera ministra de Italia, Georgia Meloni, y un encuentro con el presidente francés, Emmanuel Macron.
Por otro lado, Javier Milei planea implementar reformas significativas en la Cancillería, buscando que los diplomáticos se alineen con su ideología y apoyen las posturas de EE.UU. e Israel. Su objetivo es formar un "frente de resistencia" contra la agenda 2030 y las políticas de la ONU.
La Casa Rosada también busca reducir los gastos de traslado de los diplomáticos, que oscilan entre 16,000 y 50,000 dólares, y está trabajando en modificaciones a la Ley de Servicio Exterior. Al mismo tiempo, el Gobierno quiere fortalecer su relación con China, reactivando proyectos clave como las represas de Santa Cruz y manteniendo un diálogo sobre el swap de monedas por 6,000 millones de dólares.
La secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, fue invitada a la Exposición Internacional de Importaciones en Shanghái, aunque aún no confirmó su asistencia. "Milei no criticó a China ante la ONU porque queremos mejorar el vínculo", concluyó un funcionario del gobierno.