El Gobierno decidió postergar hasta abril de 2025 la eliminación total de los subsidios a las tarifas de luz y gas. Así lo confirmó la secretaria de Energía, María Tettamanti, quien explicó que, aunque el objetivo es que los usuarios paguen el precio total de lo que consumen, se está trabajando en un nuevo régimen que contemple tarifas focalizadas para quienes realmente no pueden afrontar los costos. 

Este plan de segmentación de subsidios, implementado desde 2022, establece tres niveles según los ingresos de los usuarios: N1 (altos), N2 (medios) y N3 (bajos). Si bien la actual gestión comenzó a recortar los subsidios, el objetivo es eliminar estos beneficios de forma total. Inicialmente, se pensó que este cambio ocurriría en 2025, pero los recientes cambios en el área energética y la necesidad de evitar posibles cortes masivos de luz en el verano hicieron que se posponga la medida hasta abril del próximo año. 

Tettamanti defendió la postura del Gobierno, señalando que el aumento de tarifas se dio sin los problemas que se presentaron en el pasado: "La sociedad entendió que lo que no se paga por un lado, se paga por el otro", resaltó. La funcionaria destacó que las tarifas más altas tienen la contracara de permitir una disminución del déficit fiscal y la inflación, lo que a su vez beneficia a los impuestos y reduce la carga fiscal en general. 

Según cálculos oficiales, los usuarios residenciales actualmente pagan hasta el 80% del costo total de las tarifas de luz y gas. Sin embargo, Tettamanti detalló que la idea del nuevo régimen es fomentar la eficiencia en el uso de estos servicios, con un bloque mínimo subsidiado, pero a partir de cierto consumo, los usuarios deberán pagar el costo real de la producción, distribución y transporte. "Queremos que la tarifa refleje las diferencias de necesidades en las distintas geografías, debido al clima, y en gas ya existe un sistema así, pero en energía eléctrica no", explicó. 

Aunque el nuevo esquema de tarifas aún está en análisis, Tettamanti subrayó que se está trabajando para implementarlo gradualmente hasta abril de 2025. 

En el evento Energy Day, organizado por el sitio especializado Econojournal, la secretaria de Energía puntualizó que si bien les hubiera gustado anunciar el nuevo sistema esta semana, todavía se encuentran realizando los últimos cálculos sobre el impacto de los aumentos. 

Prórroga de la emergencia energética 

La postergación de la eliminación total de subsidios también sigue a la reciente prórroga por seis meses de la emergencia energética. Esto se extendió hasta julio el plazo para completar la Revisión Tarifaria Integral (RTI), que determinará los niveles de inversión y aumentos tarifarios para las generadoras, transportadoras y distribuidoras de electricidad y gas durante los próximos cinco años. 

Tettamanti aseguró que ya se comenzó a trabajar en la RTI, con la participación de Osvaldo Rolando, designado como nuevo interventor del Ente Nacional Regulador de la Electricidad (ENRE). La funcionaria precisó que el valor de las tarifas deberá estar basado en una metodología clara que respete los cálculos establecidos por los entes reguladores. Aunque dieron avances en las tarifas de empresas como Edesur, Edenor y Transener, la funcionaria reconoció que en el sector del gas natural aún no avanzaron lo suficiente, aunque es una cuestión que se abordará de forma urgente. 

En cuanto a los plazos de la RTI, Tettamanti comentó que se está evaluando el ritmo con el cual se implementará, para determinar si será de una sola vez o en varias etapas, como ocurrió con la RTI de 2017. Según la secretaria de Energía, las tarifas deben ser justas y razonables, asegurando la rentabilidad de las empresas del sector, pero también cubriendo los costos de producción y distribución.