La condición de Pichetto para apoyar al Gobierno en el Presupuesto 2025

Con el financiamiento de las universidades y la controvertida privatización de Aerolíneas Argentinas como telones de fondo, el Gobierno inicia el debate por el Presupuesto 2025 en la Cámara de Diputados. A pocos días del comienzo de la discusión, el bloque de Miguel Ángel Pichetto condicionó su apoyo a la presencia del ministro de Economía, Luis Caputo, en el Congreso.

El martes 8 de octubre a las 14 horas, la comisión de Presupuesto se reunirá con la presencia de los secretarios de Hacienda y Finanzas. Sin embargo, el oficialismo se enfrenta a un escenario complicado. Miguel Ángel Pichetto, presidente de Encuentro Federal, dejó claro que su bloque no apoyará el Presupuesto sin la intervención de Caputo, un pedido que genera fricción entre los aliados del Gobierno.

La presión también proviene del kirchnerismo, que exige que el ministro explique en detalle el presupuesto, especialmente luego de la reducción de la propuesta inicial de 60 mil millones de dólares a solo 20 mil millones. En medio de este clima tenso, los gobernadores están preparando estrategias para negociar más fondos, conscientes de que el ajuste fiscal propuesto por Javier Milei podría recortar sus ingresos para obras públicas.

La situación de las universidades

Uno de los temas candentes en esta discusión es el financiamiento de las universidades. Desde el oficialismo, se dejó entrever que el apoyo a la educación superior dependerá de que se presente una propuesta concreta sobre cómo se asignarán los recursos. El secretario de Hacienda, Carlos Guberman, y el secretario de Finanzas, Pablo Quirno, deberán explicar la lógica del presupuesto ante una comisión en la que el oficialismo cuenta con solo seis representantes de un total de 49.

Con la tensión en aumento, el presidente de la Cámara, Martín Menem, sugirió que podría organizar una reunión informal con Pichetto y Caputo para tratar de encontrar un terreno común. Sin embargo, la falta de consenso se siente en el aire. La oposición, encabezada por Pichetto, mostró un enfoque cada vez más crítico hacia la Casa Rosada, lo que complica aún más el panorama.