Mauricio Macri, expresidente de Argentina, no pudo ocultar su descontento con la falta de una alianza electoral entre el PRO y La Libertad Avanza (LLA) en la Ciudad de Buenos Aires. A pesar de que ha dejado en claro que no será candidato este año, Macri sigue desempeñando un rol activo en la campaña del PRO y se mostró preocupado por la situación política que atraviesa su espacio.

El exmandatario aprovechó para pedir el voto para el PRO, especialmente en la capital, donde teme que el electorado tradicional del macrismo termine volviendo sus votos hacia la opción libertaria de Javier Milei, lo que podría desplazar al PRO de su histórica base electoral.

Macri apunta a la falta de institucionalidad del gobierno

Uno de los puntos que Macri destacó fue su creciente preocupación por la falta de "apego a lo institucional" por parte del actual gobierno. Según él, esta falta de compromiso con las reglas y las instituciones está comenzando a afectar gravemente el plan económico, un tema que cada vez genera más inquietud entre la sociedad.

El papel de Karina Milei en el fracaso de la alianza

A pesar de que Macri ha intentado mantener una relación cordial con Javier Milei, sus críticas se dirigieron directamente hacia Karina Milei, hermana del presidente. El expresidente expresó su frustración por la imposibilidad de concretar una alianza electoral con LLA, y culpó a Karina de bloquear cualquier posibilidad de acuerdo.

Macri aseguró que el supuesto "trabajo conjunto" entre ambos espacios nunca existió, y que en varias ocasiones fue el PRO quien tuvo que "rescatar" a La Libertad Avanza de situaciones difíciles. También se mostró amargado por la falta de avances, subrayando que la hermana de Milei fue la responsable de que las conversaciones no llegaran a buen puerto, citando su negativa a las propuestas de acercamiento.

"Ni siquiera nos llamaron una vez", lamentó Macri, quien dejó claro que la única reunión que se mantuvo sobre la mesa fue breve y sin avances concretos. La frustración de Macri es evidente, especialmente por el hecho de que las esperanzas de una unión entre el PRO y el libertarismo en la capital se desvanecieron ante la postura inflexible de Karina Milei.