Más de 40 facultades continúan tomadas y se agrava el conflicto con el Gobierno
El paro general previsto para el jueves 17 de octubre se perfila como una nueva escalada en la disputa.
El conflicto entre los estudiantes universitarios y el Gobierno continúa intensificándose. A casi una semana de iniciadas las tomas, más de 40 facultades de todo el país permanecen ocupadas, y se espera que más se sumen en los próximos días. El detonante fue el veto presidencial a la Ley de Financiamiento Universitario, que generó la indignación de los movimientos estudiantiles, quienes decidieron extender la protesta hasta el jueves 17 de octubre, día en que también está programado un paro general universitario.
Las facultades que mantienen la ocupación incluyen importantes casas de estudio como la Universidad de Buenos Aires (UBA), la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) y la Universidad Nacional de Córdoba (UNC). En la UBA, las facultades de Psicología, Sociales, Filosofía y Letras, Arquitectura, Diseño y Urbanismo (FADU) y Exactas siguen bajo control estudiantil. En tanto, las facultades de Derecho y Medicina decidieron levantar la medida, mientras que Ingeniería no participó en la protesta desde el principio.
Por su parte, en la UNLP, las facultades de Psicología, Humanidades, Artes, Trabajo Social y otras 10 unidades académicas permanecen ocupadas. Asimismo, en la Universidad Nacional de Córdoba, los estudiantes resolvieron continuar las tomas en las facultades de Filosofía, Humanidades, Arquitectura y Artes, mientras se evalúan nuevas acciones.
La situación se replica en universidades de todo el país, como la Universidad Nacional de Rosario (UNR), la Universidad Nacional de San Luis (UNSL) y la Universidad Nacional de Mar del Plata (UNMDP). En cada una de estas instituciones, las facultades ocupadas abarcan diversas disciplinas, desde Ciencias Económicas hasta Psicología y Ciencias de la Salud.
A su vez, los estudiantes de la Universidad Nacional de Tucumán (UNT) decidieron mantener la ocupación de las facultades de Psicología, Filosofía y Letras y Cine, siendo esta última por tiempo indefinido. Lo mismo ocurre en la Universidad Nacional de Tierra del Fuego (UNTDF), donde las tomas se mantendrán acompañadas de clases públicas y marchas por la ciudad.
El rol del Gobierno en la disputa
El Gobierno no emitió una respuesta concreta ante las demandas de los estudiantes, lo que generó mayor malestar en los claustros. La Procuración del Tesoro autorizó a la SIGEN a auditar a las universidades, medida que los estudiantes interpretaron como una provocación. Mientras tanto, desde los centros de estudiantes se preparan para una semana de protestas más intensas, con clases públicas y cortes de ruta programados para el jueves.
El conflicto sigue escalando y parece lejos de encontrar una solución. Las universidades están inmersas en una lucha que involucra tanto la defensa de la educación pública como la exigencia de financiamiento adecuado para las casas de altos estudios del país.