Werthein juró como canciller, tras la salida de Mondino

En un evento significativo para el Gobierno argentino, Javier Milei tomó juramento a Gerardo Werthein como nuevo canciller. La ceremonia tuvo lugar en el Salón Blanco de la Casa Rosada, donde Werthein, exembajador en Estados Unidos, juró "por dios, la patria y la torá". 

Su designación se produce tras la salida de Diana Mondino, quien fue destituida después de votar en contra del bloque de Estados Unidos a Cuba.

Milei, en un momento emotivo, afirmó: "Te mandan señales las fuerzas del cielo" al recibir a Werthein en su equipo. El evento contó con la presencia de varios ministros, como Luis Petri (Defensa), Guillermo Franco (jefe de Gabinete) y Luis Caputo (Economía), así como la secretaria de Presidencia, Karina Milei, y la hija del expresidente Carlos Menem, Zulemita Menem. Sin embargo, la notable ausencia fue la de la vice, Victoria Villarruel.

Reestructuración y Cambios en Cancillería

La llegada de Werthein al Palacio San Martín se enmarca en una serie de cambios en la Cancillería, impulsados por la intención del Gobierno de alinear su personal con la ideología oficial. En este sentido, Milei señaló su objetivo de realizar auditorías para identificar y destituir a aquellos diplomáticos que no compartan la visión del Ejecutivo. La influencia de Karina Milei en esta reestructuración ha sido clave, a través de la abogada Úrsula Basset, quien mantiene un diálogo activo con los diplomáticos argentinos.

La situación en la Cancillería se volvió más tensa tras la renuncia del exsecretario de Relaciones Exteriores, Leopoldo Sahores, y el desplazamiento de Ricardo Lagorio de la embajada ante la ONU, donde asumió Francisco Tropepi. Además, Eduardo Bustamante fue nombrado vicecanciller en un acuerdo entre el Gobierno y el PRO.

Nuevas Políticas Diplomáticas

Bajo la dirección de Werthein, el Gobierno de Milei planea una intervención profunda en la Cancillería. Una de las principales propuestas es que los diplomáticos argentinos voten en concordancia con Estados Unidos e Israel, como parte de un "frente de resistencia" contra la Agenda 2030 y las políticas de la ONU. 

Según un comunicado oficial, el objetivo es asegurar que el cuerpo diplomático refleje en sus decisiones los valores de libertad, soberanía y derechos individuales que caracterizan a las democracias occidentales.

El anuncio de Werthein llega en un momento clave, justo un día antes de las elecciones presidenciales en Estados Unidos, donde los ciudadanos elegirán entre Kamala Harris y Donald Trump. Este contexto internacional podría influir en la dirección que tome la nueva Cancillería en los próximos meses.